Hace algunos fines de semana, Jaume y yo hicimos una escapada a Pamplona. Aprovechando que una festividad de nuestra ciudad caía en lunes, (y que las pequeñas obligaciones familiares no nos lo impedían), hicimos la maleta y nos fuimos de pintxos:
Estos pequeños y deliciosos platos se sirven en cada uno de los numerosos bares que tiene la ciudad, (y a razón de como están de llenas las barras de gente, te das cuenta de que los pintxos son, junto a los San Fermines, una de las grandes pasiones de Pamplona).
Nosotros por esta vez nos decantamos por los que son un poco más elaborados, así que visitamos los conocidos El Gaucho y La cocina de Alex Mugica, Casa Otano y Don Hilarion.
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